México compraría la versión corta del Super Hércules
En septiembre del 2012, la
Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa de los Estados Unidos
notificó al Congreso de ese país, sobre una posible venta militar extranjera al
Gobierno de México de dos aviones C-130J-30, repuestos, entrenamiento y apoyo
logístico asociados por un costo estimado de $412 millones de dólares.
En ese momento el Gobierno de
México había solicitado la venta de dos aeronaves C-130J-30, la versión ampliada
de esta aeronave, con un tamaño similar a los C-130 Mk3 que opera la Fuerza
Aérea Mexicana, también se solicitaron diez motores AE2100D3 (8 instalados y 2
de repuesto), modificaciones de aeronaves, equipos de comunicación, repuestos y
equipos de soporte y prueba, publicaciones y documentación técnica,
capacitación de personal y equipos de capacitación además de tres años de
capacitación y soporte de mantenimiento. El costo estimado era de 412 millones
de dólares y no contemplaba acuerdos de compensación en relación con esta
posible venta. El C-130J-30 es una versión ampliada del C-130J, que añade 15
pies al fuselaje, aumentando el espacio utilizable (dos paletas más de equipo)
en el compartimiento de carga.
El que no se contemplaran
acuerdos de compensación es un tema que da para mucho, pero en esta ocasión lo
pasaremos de largo, ya que queremos hacer notar que ahora en el 2024, la
solicitud de recursos de la FAM se centra en el proyecto de: “adquisición de
dos aviones C-130J Súper Hércules, así como el soporte logístico por un tiempo
de un año y adiestramiento inicial para tres tripulaciones de vuelo, la cual
arroja un costo de 281 millones de dólares.
Respecto a esto lo primero que llama la atención es el costo, dos C-130J por 281 millones contra 421 millones de dólares por dos C-130J-30, nos indican que estamos hablando de una aeronave más económica en un rango de entre 30 a 40 millones menos, lo que apunta a la versión corta de la aeronave y al parecer no se contempló de momento la compra de motores de repuesto y se solicitó solo un año de soporte de mantenimiento, lo anterior es lógico si tomamos en cuenta los 10 años de operación del C-27J en México, cuyos sistemas están homologados a los que usa la aeronave de Lockheed Martin.
Otra diferencia importante que en
el 2012 se proponía la asignación de personal por un período de tres años para
ayudar a México a establecer un sistema de suministro en apoyo de las
operaciones de vuelo, la gestión de suministros, el control de inventario y los
procedimientos de documentación, aunque ahora se sabe que la FAM ha avanzado en
ese campo a través de nuevas aplicaciones informáticas desarrolladas en el
país.
El operar los C-130J permitirá realizar, por un periodo de veinte años, un promedio de 51,000 operaciones (197,192 horas de vuelo), con la flota de aeronaves en su conjunto, cabe recalcar que las horas de vuelo son las que se pueden realizar, pero no las que se realizan, es decir se tiene la capacidad volar cuatro horas por cada vuelo, pero los vuelos dependen de la distancia, velocidad, peso de la carga, factores meteorológicos etc. Para determinar el tiempo de vuelo.
A principio de enero de 2024, la
Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa de los Estados Unidos no
ha publicado la posible venta militar extranjera de los dos C-130J al Gobierno
de México.
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